Por: Michelle Mero, Juventino Morales, Doris Vásquez, Romelia Sánchez, Zarabel Sánchez
Definitivamente que tenemos que elogiar que el modelo económico neoliberal impuesto durante la década de 1990 que nos ha permitido ser uno de los países mas globalizados en América Latina durante varios años.
Contamos con una economía totalmente dolarizada y sin banco central, lo que nos permite una enorme ventaja frente a otros países del área.
Nuestra economía ciertamente está basada en el sector terciario (de servicios) y básicamente de 75% del PIB está representado por este rubro, sin embargo se ha dado un aumento vertiginoso en el sector de la construcción y algo más en el sector industrial. Todos estos elementos tienen diferentes variantes, que de no tomar los correctivos necesarios y hacemos un alto en el análisis económico o en el modelo económico que realmente debemos adoptar, nos veremos realmente afectados, pese a que contemos con un Canal y una Zona Libre, que aportan grandes cifras al presupuesto de la economía.
Sin lugar a dudas la ciudad de Panamá en estos últimos años ha crecido y hay mucho de cierto en esto, pero ¿Llegar a compararse a un país de primer mundo como lo es Singapur?, estamos bastante lejos de la realidad. Ciertamente se han hecho grandes inversiones en infraestructuras tales como la construcción de nuevos hospitales, construcción de carreteras, el metro y algunas otras inversiones, sin embargo el lado negativo es que ha dado como resultado la inflación y el coste alto de la vida.
Nuestro país ha sido colocado según PISA, como la economía No. 63 y en comparación con Singapur podemos señalar que Singapur se ha convertido en la economía Asiática más competitiva de Asia del Pacifico, la cual ha desbancado a Japón, ¿Cómo pues pretendemos lograr que nuestro país se convierta en el Singapur de América Central?
Realidad o Mito
Nuestro país cuenta con una de las peores distribuciones per capita independientemente que tengamos un canal que durante el año 2010 tuvo un notable crecimiento en el tráfico y cobro de peajes, aunado al establecimiento de regulaciones favorables para la inversión extranjera, sin embargo todo esto se ve opacado por frente a los actos de corrupción y nepotismo, así como los bajos niveles educativos con que cuenta nuestro país. Como ejemplo de lo antes descrito, podemos señalar que el auge económico, la mano de obra barata, la explotación de recursos naturales o de productos agrícolas, ha exacerbado el apetito de los políticos por los nuevos ingresos fiscales generados. En adición a lo antes expuesto, no podemos obviar que aún existe “la coima” al funcionario, altas personerías inclinando aprobaciones para las licitaciones o concesiones por altas sumas de dinero o una participación en acciones del negocio, por un lado las escuelas cada día se deterioran mas por la falta de mantenimiento, aunado a esto el de estudiantes por el crecimiento de la población y las infraestructuras siguen siendo las mismas, los estudiantes van en retroceso en su nivel académico, ya que no está consonó con la realidad. ¿Cómo pues pretendemos lograr que nuestro país se convierta en el Singapur de América Central?
La economía de Singapur, pese a su grado de competitividad es una de las más sanas, contrariamente a lo que pasa en nuestro país.
En nuestra opinión, el gobierno debería crear una nueva política, tendiente a la revisión de las acciones que lo llevaron al Pódium presidencial. Por ejemplo:
- Crear la unidad administrativa de investigación, la cual le permitirá a la secretaria nacional contra la corrupción, actuar en forma independiente.
- También puede darse que se cumpla anualmente con el informe de movimiento patrimonial.
- Poner fin al despotismo y el clientelismo político y que sólo ocupen cargos dentro del engranaje gubernamental aquellos ciudadanos que cuenten con la preparación y experiencia requerida.
- Realizar una gran inversión en la educación para añadir un valor agregado a la mano de obra panameña y que pueda ser calificada, ya que a través de la educación podemos llegar a ser un país más competitivo.
- Es imperativo en un país con miras a imitar a un país como Singapur, el asegurar la seguridad ciudadana e implantar mecanismos para salvaguardar la honra y bienes de sus ciudadanos.
Finalmente, reconocemos que Panamá cuenta con algunas ventajas tanto financieras, como económicas, pero ello no lo puede describir como el Singapur de América Central.
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