miércoles, 31 de agosto de 2011

EL OTOÑO NEGRO DE 1929


Hace un tiempo atrás, tan atrás que no me acuerdo, se dio una grave crisis económica mundial (1929) que se extendió por casi o más de una década (dependiendo del país de donde la vea).
La gran depresión tuvo devastadores efectos sobre casi todos los países, donde la renta nacional, los ingresos fiscales, los beneficios y los precios cayeron, el comercio internacional se vino abajo, el desempleo alcanzo cifras inimaginables, la crisis alcanzo también las zonas industriales y las construcciones donde fueron arrasadas  al igual que la agricultura que perdía dinero ya que sus precios habían caído a un nivel irrisorio.
Pero que paso? como paso?
La Gran Depresión no fue más que la combinación de sucesos desafortunados comenzando con la caída de la bolsa de valores el martes 29 de octubre, que se llamo como el "Martes Negro" que no tiene mucho que ver con Jason y su "Viernes 13" pero igual dio miedo.
Ocurre que por aquellos años la Bolsa de valores estaba en un extraordinario auge, y las personas , Ignorantes en su mayoría, tenían la percepción que al invertir poco dinero podías recibir mucho mas o que podías comprar las mejores acciones a un muy bajo costo, palabras más, palabras menos: ponías poquito y recibías mucho...me pregunto que será de David Murcia?    
De vuelta al tema, esta creencia se dio gracias a la interesada especulación balística donde se aprovechabas de las personas más ingenuas como los jubilados y asalariados. Esto logro que la demanda por la Bolsa creciera tanto que la cotización de la misma era meramente especulativa sin tener realmente bases o una autentica solvencia de sociedad.
Así al mejor estilo de una pirámide, la Bolsa colapso y cuestión de horas se perdió todo lo ganado en años. Pequeños y medianos especuladores quedaron arruinados y los bancos en un intento desesperado de salvar algo, reúnen dinero para sostener acciones sin mucha suerte.
La caída de la Bolsa es solo el comienzo de la "bola de nieve", porque a partir de aquí es donde los bancos también se declaran en crisis esperanzándose a la Reserva Federal para que les diera liquidez y así subsistir.
Pero nada más alejado de la realidad, la Reserva Federal reduce su  oferta monetaria y suben los intereses creando así una receta infalible para la quiebra masiva de bancos, para la deflación y reducción drástica de consumo, volviéndolo en un círculo vicioso.
Otros factores que surgieron y ayudaron a agrietar la sangrante herida del bolsillo mundial fueron el brutal hundimiento del comercio mundial y luego en los años mozos de la Depresión fue la repatriación del capital.
Para los Estados Unidos esta fue una época que les dejo enseñanzas imborrables por la necesidad y la unión que hubo para salir de la crisis. Y no fue sino hasta 1932 donde comienza lentamente la recuperación de mencionada crisis.
Pero aunque, en el resto del mundo se cocinaba una guerra mundial, los Estados Unidos veían en Hitler un Mesías capaz de sacarlos indirectamente de su crisis al ser ellos los principales proveedores de armas para Francia y Gran Bretaña; Porque siendo honestos si esa guerra no hubiese existido no habrían podido salir tan fácilmente de esa crisis.
Con esta guerra se hizo que el desempleo se redujera porque se revitalizó la industria mas la llamada "economía de guerra", la propaganda, la unión por "la patria", hace que recibas dinero sin tener que pagar tanta mano de obra.
Al final como es costumbre el bueno triunfa sobre el malo, el príncipe rescata a la princesa, los Estados Unidos vuelven a ser la potencia mundial mientras sus aliados están en quiebra (y no aliados) , levantándose de sus cenizas como el ave fénix fortalecidos por las victorias de la guerra, por la cantidad de dinero recibido como proveedor de armas, y el genial modelo ideado por  Keynes.
Para cerrar, a lo que parece una segunda vuelta de la Gran Depresión, está el mundo listo?  Hemos tomados correctivos? se necesita otra guerra o un genio como Keynes?.
Written by:
Diógenes Pinzón        
Perla Castillero
Cesar Herrera
Lian Vásquez
Miguel Yáñez

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