miércoles, 29 de febrero de 2012

SINGAPUR EN AMERICA CENTRAL


 
Por:    Emilio Oro
            Wendy Pérez
            Martha Rojas

Luego de leer el artículo Singapur en América central? Publicada en la revista The Economist ,importate revista reconocida a nivel mundial, puedo recalcar el gran interés de la economía panameña por parte de los analistas económicos.
Panamá es el centro bancario más importante de América Latina, que posee una economía abierta y alto movimiento en sus puertos comparándolo con un país como Singapur que lleva más tiempo con una economía más pujante.
El Gobierno Panameño espera lograr este año (2012) un crecimiento de 7,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), a pesar de la crisis económica global que, hasta ahora, ha afectado muy poco al país. Singapur es uno de los países con más altos índices de educación (ocupan un cuarto lugar) a diferencia de Panamá los niveles de escolaridad son de baja calidad, según el Test denominado PISA, Panamá está en el número 64 de 65 países evaluados por debajo solo de Albania, como consecuencia tenemos una mano de obra poco calificada, lo cual frena el crecimiento y la productividad.
En materia de transparencia, creo que lo más importante es la poca confiabilidad que muestran los gobernantes en su gestión. Los altos índices de corrupción no son nada nuevo. El gobierno actual ha estado más al pendiente de interferir con la Corte Suprema de Justicia y promover cada vez más la segunda vuelta y acortar el periodo de reelección, lo cual distrae al gobierno en dar garantías y buenas condiciones para tener un verdadero crecimiento como país.

* Grupo Análisis del Entorno. Universidad Interamericana de Panamá

NEOLIBERALISMO EL CONSEJO DE WASHINGTON


 
Por:
Edith Madrid                                     Paula Medina   
Juana Herrera                                  Jacqueline Arauz                                                                                          

Este es un modelo clásico del Neoliberalismo en el que se trata de plasmar en que época de nuestros tiempos entro a regir este modelo, se habla de que el mismo se genero en el año 1929 con la depresión mundial.

Otros indican que fue en el año 1979 con la entrada de los mandatos de Margaret Tacher “Dama de Hierro” y el partido conservador Ingles.
Pero la verdadera crisis de las naciones empieza en el año 1982 cuando esta  azotaba a los países, en estos momentos México indica que no puede más con la deuda externa que acarreaba, ante estos acontecimientos el Banco Mundial y el Fondo Monetarios Internacional inician entonces su papel como mediadores entre los países, suben las tasas de interés, se crean planes de cambio de estructuras en las cuales se incluía la venta de los activos fijos que mantenían los gobiernos.

Recordando que el  mundo venia de un modelo económico donde el estado tenía mucha participación, en el caso específico de  Panamá el estado mantenía empresas como la Luz, Telefonía, hoteles entre otras empresas,  que por presiones internacionales se vio obligada a vender. Estos acuerdos se efectuaban mediante carta de internacionales donde los países se comprometían a cumplir con los acuerdos establecidos, ya que transformarlo en ley era ilegal.
Debido a todos estos acontecimientos la deuda de los países de 1982 a 1997 aumento de 300 a 600 millones creando un verdadero problema, además de la venta de sus activos también contemplaba aperturas de mercados eliminando restricciones a la inversión extranjera, reducción de aranceles entre otras medidas que se tomaban de países en países; proceso que empezó en el año 1982 y no fue hasta el año 1989 que se sintetizan en el “CONSENSO DE WASHINGTON”.

miércoles, 15 de febrero de 2012

LA GRAN DEPRESIÓN


Escrito por: Cristina Tedman, Jamie Zapata, Edgardo Marshall, Ruth Rodríguez, Afranio Acosta


El bajón económico que experimentó Norteamérica, particularmente Estados Unidos durante la década de 1929 a 1939 es conocido como “La Gran Depresión”. Ésta fue la más larga y más severa crisis económica nunca antes experimentada por los países del Mundo Industrializado.
La primera parte de la década de los 1920 había mostrado un auge económico para los Estados Unidos, ya que ante la masiva destrucción de países europeos después de la I Guerra Mundial, sobre todo de Alemania, la situación tanto en el sector industrial como en sector agrícola se elevaba empujada por la demanda mundial, sin importar que los precios de los artículos producidos se mantuvieran bajos. Consecuentemente, E.E.U.U adoptó una política de exportación masiva hacia Europa, quien estaba pasando por momentos difíciles de recuperación ya que la guerra había destruido tanto la industria como la producción agropecuaria de la zona. Eventualmente, Europa se volvió incapaz de seguir importando los productos de Estados Unidos, lo cual sólo generó un aumento del inventario al contraer la demanda y disminuyó su poder adquisitivo.
En octubre de 1929, la bolsa de valores de Nueva York sufrió una venta inusual de acciones, registrando perdidas entre 18 a 20 puntos el jueves 23 de octubre; 20 y 30 puntos el viernes 24, hasta que el martes 29 de octubre de 1929 –conocido como “martes negro”- 16 millones y medio de acciones se vendieron con pérdida a un promedio de 40%. De nada valieron los esfuerzos de los bancos que, reuniendo alrededor de 240 millones de dólares, quisieron comprar días antes un gran número de acciones por encima de su valor para así tratar de sostener las cotizaciones. Esto no evitó que los inversionistas arruinados retiraran sus ahorros, descapitalizando aún más a los bancos. Todo esto dio como resultado que sólo en Estados Unidos, alredor de 2,000 bancos cerraran y 32,000 empresas se hayan declarado en banca rota. Para 1932 el PIB de Estados Unidos había disminuido un 27% y la producción industrial en un 50%,  produciendo así una hola de desempleo masivo que en 1933 se registró en 25%.
Los críticos y analistas económicos sustentan que uno de los motivos por los cuales la gran depresión se mantuvo fue también por la insistencia de aplicar un modelo liberal basado en “laissez faire”: el mismo mercado iba a tomar su rumbo natural, sin necesidad de que hubiera intervención de ningún tipo, mucho menos del gobierno. La “mano invisible” de Adam Smith iba a actuar sobre la economía y la iba estabilizar eventualmente por sí sola. Fue Franklin D. Roosevelt quién, adoptando el modelo keynesiano, hace que el estado impulse el crecimiento de la demanda mediante planes de obras públicas con el fin de reducir la depresión del salario, lo cual significaría un incremento en la propensión marginal del ahorro, de tal forma que crezca la demanda,  lo cual hace que los inversionistas se decidan  a crear empresas que respondan a estas demandas, elevando así el crecimiento económico.

miércoles, 8 de febrero de 2012

CANASTA BÁSICA DEL PANAMEÑO

 Por:    Emilio Oro
            Wendy Pérez
            Martha Rojas

Debemos partir del concepto elemental de canasta básica, definiéndolo como el conjunto de bienes esenciales para que la familia, en nuestro caso compuesta por 3.8 miembros, pueda cubrir sus necesidades primarias a fin de lograr una vida sana.
Es importante destacar que el cálculo del mismo se hace en base a las energías calóricas recomendadas para el consumo, expresados en cantidades que permiten satisfacer las necesidades básicas de una población. En realidad el término de canasta básica es una ironía ya que el ciudadano no satisface sus necesidades básicas con ésta suma de dinero que arrojan las Autoridades de nuestro país. El problema de dicha Canasta consiste en que el panameño humilde no acude a un supermercado con B/.280.68 (Costo de la canasta básica a diciembre 2011) para hacer compras un vez al mes o con B/.140.34 cada quince días, sino que va a la tienda del “chinito” a comprar día a día lo que va necesitando para alimentar a su familia, por ende compra de a poco. En este caso, este panameño gasta más dinero de esta manera que comprando en una sola ida al supermercado los alimentos para un mes o quince días.
Este costo de la canasta básica, se ve afectado por varios factores como los incrementos en los insumos de producción para los productores de alimentos, la creciente dependencia de alimentos y productos importados en detrimento de la producción local, además de las disminuciones constantes de los aranceles de importación para algunos productos; añadimos a esto el costo de la mano de obra de producción tal y como se ve reflejado en el aumento considerable del salario mínimo. Todo esto crea una serie de aumentos que se ven reflejados por el efecto dominó y que al final paga el panameño humilde que ve limitado el acceso a muchos de los productos que forman parte de esta Canasta Básica.

Canasta Básica


Por

Redactado por:
Mitzia Carrera
Brigdalys Díaz
Flor Quintero
Doris Quiroz
Fabio Villar


Nuestro país es conocido en algunos sectores internacionales como un país privilegiado, donde la crisis económica que azoto a muchas potencias internacionales, no afecto en gran medida nuestro país, el cual supo mantenerse con una escala creciente durante esta recesión, y desarrollando algunos sectores como la construcción, el turismo, los servicios y el aumento del transito por el canal de Panamá, manteniendo un país estable en cierta medida.

Sin embargo uno de los temas primordiales para la ciudadanía panameña es el incremento de los alimentos, donde el incremento de la Canasta Básica en nuestro país ha ido en aumento los últimos ocho años, sin embargo para algunas instituciones es todo lo contrario. Lo que no se puede discutir es que el incremento de la vida ha aumentado de manera no escalonada, disparando el costo de los servicios, el costo de la alimentación y el entorno de la vida, dejando a un lado el aumento de los salarios.
No podemos hablar de baja en la Canasta Básica cuando el precio de los alimentos aumenta diariamente, y la regulación no se deja ver, cuando el gobierno marca tendencias y la vida diaria del panameño común es totalmente diferente. Donde tenemos que ajustarnos al incremento de la vida con el mismo salario de hace diez años.
La escala no esta ajustada, así como aumenta todo, debe hacerse un ajuste para crear aumentos escalonados, para que la ciudadanía pueda cotejar gastos & salario.
Aunque exista en nuestro país opciones de diferentes cadenas de supermercados, la diferencia en ocasiones son de centavos, lo que indica que si realmente se interesaran en hacer ajustes positivos por el bienestar de las familias panameñas, iniciaríamos con los Super 99, donde nuestro presidente  Ricardo Martinelli es el propietario de toda esta cadena de supermercados, sin embargo como empresario no va hacer ningún tipo de cambio que puedan generar algún tipo de baja en sus ganancias.

Redactado por:
Mitzia Carrera
Brigdalys Díaz
Flor Quintero
Doris Quiroz
Fabio Villar