Por:
Idalia Wilson Missourys Nunez Juan Mejia
Mavel Del Cid Jan Espino
Es muy probable que para
nosotros los panameños la palabra tragedia
sea una palabra que
represente algún tipo de fenómeno ambiental, accidentes
catastróficos o evento fortuito que no se ha
podido evitar. Ciertamente en muchos otros países la palabra tragedia
representa el diario vivir, una situación a la cual han tenido que
acostumbrarse sin opción alguna; claro es el ejemplo de lo que actualmente vive
la población en Grecia. Actualmente en Grecia
existe un incremento del 27.6%
del desempleo comparado con el 23% que presentaba el año pasado, esta situación
ha generado un éxodo de la población
joven entre 15 y 24 años que antes
residía en el país. Con la economía
griega en su sexto año consecutivo de recesión y 1,38 millón de personas
oficialmente sin empleo, la situación es alarmante. Causas de la crisis: déficit sostenido del
presupuesto del Estado Griego (gastos
superiores a los ingresos) provoca un incremento progresivo en la deuda, al
punto en que se incurre en incumplimiento del servicio de la deuda; lo que da
inicio a un circulo vicioso de deterioro de las finanzas publicas al cerrarles
las puertas de crédito internacional y encarecer los intereses por el
downgrading de la calificación de riesgo del país. Aunado a ello, se inician recortes
presupuestarios que ponen un freno a la actividad económica del país y
disminuyen los recaudos del gobierno, agravando la situación financiera
descrita.
Más de 15 euro zonas han
contribuido con el paso de los años para
el rescate de Grecia pero existe siempre el temor del efecto dominó que pondría
en peligro a los miembros más débiles de estas zonas.
Muchas
propuestas y planes han sido probados desde el 2010 para tratar de
superar esta crisis. A cambio de la ayuda
internacional, los gobiernos impusieron medidas de austeridad, inclusive
aumentos fiscales y reducciones salariales y de pensiones, aumento de precio en
el tabaco y en el alcohol y en el impuesto sobre la renta de los trabajadores.
Es posible que nuestro país
enfrente una situación igual o peor?
Sí, es posible. En una
circunstancia donde las decisiones del órgano ejecutivo están fuertemente
motivadas por el deseo de mantenerse en el poder ya se observan señales que los
ingresos corrientes del gobierno son insuficientes para cubrir el plan de
inversiones, acelerado y magnificado por intenciones electoreras, tales como:
(1) modificación de la ley que rige el uso de Fondo de Ahorro Panameño, antes
conocido como Fondo Fiduciario, (2) flexibilización de la ley para permitir la
venta de las acciones del estado en las instituciones semipúblicas; (3) déficit
superior al establecido en la ley, entre otras.
Una persistencia a corto plazo en este tren frenético de gastos e
inversiones puede llevar al país a recorrer los primeros pasos del tortuoso
camino que ha sufrido Grecia.
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